El Blog de Pippi

 423 COLORES

Título: 423 colores

Autores: Juan Gallardo y Rafael Avendaño

Editorial: Versátil

"Me entristece la pobreza de algunas personas, la pobreza de conocimiento, la pobreza de empatía, la determinación inquebrantable de ignorar el sufrimiento de otros seres humanos".

Ghada es una pequeña de ocho años, huérfana de madre y ciega de nacimiento, que vive con su padre en Alepo, Siria. De un día para otro tienen que abandonar su hogar y todas sus pertenencias para huir de la crueldad de la guerra, que como un feroz dragón sobrevuela los tejados de la ciudad arrasando con todo a su paso.

A través de la inocencia de Ghada y los ojos de su padre conoceremos esta conmovedora historia en la que veremos cómo su ciudad y el que siempre ha sido su hogar, se transforma en un infierno en el que crueles dragones escupen fuego sin parar. Para protegerla del horror de los bombardeos y la barbarie de lo que es un ataque químico, Khaled crea un universo de fantasía para su hija, utilizando palabras mágicas y camuflando así la terrorífica realidad. Para la pequeña Ghada, huir de su hogar será como una increíble aventura en busca de una flor mágica con un poder letal contra los dragones, superando grandes obstáculos como viajar en la caja de un camión, dormir al aire libre, pasar hambre, vivir en un campamento y cruzar el mar en un pequeño bote.

Los autores consiguen mostrar la dura situación que viven millones de refugiados en el mundo. Es una conmovedora historia que refleja la dura y cruel realidad , con un final que eriza la piel. Sin duda, considero que es un libro muy necesario y no puedo dejar de recomendarlo. Pienso que debería haber más empatía y solidaridad en el mundo, ya que nadie se metería en un viaje en condiciones extremas, abandonando todo lo que tiene y poniendo en peligro su propia vida y la de su hija con la esperanza de que lo que hay al otro lado sea un poco mejor y de que la probabilidad de sobrevivir sea mayor que la de quedarse en su país. Es una historia que te hará sentir impotencia, rabia, pena e incluso vergüenza por ignorar, no querer ver o mirar hacia otro lado.

"Una vez me preguntaste qué significa ser ciego del alma, y yo te respondí que no ser capaz de apreciar la belleza del mundo. Pero ahora puedo decirte que ser ciego del alma también significa ser insensible a las injusticias que se producen en él".